domingo, 24 de enero de 2016

Las cuevas fecundantes de Sesa


 Lo que antes era gris, ahora es blanco.
Envuelta quedo en tu manto.
Lo que antes era barro ahora es carne.
Y ya que nadie la dañe.
Lo que fue un sueño es futuro.
Claro, limpio y puro.
Que esta piedra que da vida
me permita ser Madre.
Como la luz que me inunda.
Cálida y vibrante.

                                                                                   Conjuro de fertilidad

En prácticamente todas las culturas conocidad conocemos las "Cuevas fecundadoras".
En Aragón se las llamó así o también "Piedras de moros".
Estamos hablando sin duda de un rito relacionado con la fecundidad y con la diosa madre.
La mujer penetraba en el interior de la caverna y permanecía allí un determinado tiempo.
Al salir a la superficie, la mujer estaba cargada de una energía natural que la hacía áltamente fecunda.
Estas cuevas solían ser artificiales. Excavadas a mano por el hombre aunque también las hay naturales. Situadas en lugares de poder.
En la localidad de Sesa se encuantran 5 de estas cuevas.
Las más conocidas son "La Ratona", la de "Castó" y la "Cueva Vulva".
En ellas se celebraban y se dice se siguen celebrando en algunos días señalados estos rituales paganos consagrados a la diosa-madre.
Pues aunque el cristianismo al ver que no podía acabar con las arrigadas costumbres y diosas paganas decidió disfrazarlas. 
De esta guisa, la Diosa-Tierra pasó a disfrazarse con forma de Santa y las oraciones para ser una mujer fecunda se dedicaban a Santa Isabel, a Santa Ana o a Santa Filomena por nombrar algunas de ellas.
También los seguidores de las antiguas creencias disfrazaron a sus viejos dioses para que la nueva iglesia no diera con ellos y se encendieran las hogueras. De este modo comenzaron a surgir Vírgenes negras, representaciones de la diosa Isis. La Diosa-Madre.

Representaciones de Vígenes se encuentran por todo el territorio español
Aunque el sincretismo llegó, las antiguas costumbres no pudieron tampoco desarraigarse tan fácilmente, y estas cuevas siguieron utilizándose o incluso construyéndose nuevas como 
es el caso de "La Ratona"

Interior de la "Cueva Castó"

Entrada de la cueva "La Ratona", cueva artificial dataa en el Siglo X
La tradición en la zona de penetrar las mujeres en la cueva ha llegado prácticamente hasta nuestros días y aunque posiblemente ahora se haga más como tradición y folclore autóctono, no podemos desoir los consejos de nuestros ancestros y preparanos para una visita a las entrañas de la Madre Tierra. Al útero de esa Diosa-Madre que nos va a preparar y a mejorar la fertilidad.

Los rituales de fertilidad femenina presentes hasta nuestros días


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