Desde los tiempos de los moros a la reconquista tenemos Aragon plagado de castillos y torres fortificadas y en ellas por supuesto sus celdas, mazmorras y cárceles.
Cárceles donde los sentimientos de cientos de prisioneros, donde la agonía de estos hombres impregnó las paredes por siempre jamás.
Tal es el caso de las fortificaciones del pueblo de Antillón.
Se sabe que toda la zona de la muralla fortificada sirvió de cárcel hasta ya entrado el siglo XVIII.
La leyenda asegura que se escuchan ruidos extraños provenientes desde el interior de la muralla en algunas noches.
Antigua muralla de Antillón |
También tiene su leyenda negra el Castillo-Palacio de Novales donde estuvo prisionero el ministro Bernaldo de Cabrera en 1364 tras caer en desgracia ante Pedro IV.
Se cree que tras el ajusticimiento del ministro, el lugar hoy en estado algo ruinoso... quedó maldito.
Ruinas el castillo de Novales |
También en el imponente castillo de Benabarre tenemos una de las historias más sangrientas de Aragón pues es precisamente entre sus muros donde se ordenaron ejecuciones en masa a los prisioneros de las temibles batallas entre ribagorzanos del Conde Don Martín y los partidarios de su hijo Don Fernando de Aragón, hechos acontecidos entre los años de 1577 a 1589.
En este recinto también se han hecho populares las apariciones fantasmales
Castillo de Ibn Awar, en Benabarre |
También en la localidad de Puértolas hallamos la llamada Torre de la Cárcel.
El enclave fue utilizado como prisiones militares por Juan de Bardají en 1432 y se piensa que forma un triángulo mágico junto con los enclaves de la iglesia de San Vicente y la ermita de la Virgen de la Plana.
Quién sabe si más antiguas prisiones albergarán alguna almeta perdida, ¿verdad?
Por si acaso... andemos con cuidado.
El enclave fue utilizado como prisiones militares por Juan de Bardají en 1432 y se piensa que forma un triángulo mágico junto con los enclaves de la iglesia de San Vicente y la ermita de la Virgen de la Plana.
Torre de la Cárcel |
Por si acaso... andemos con cuidado.
Ahí había que meter a los de PP
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