Esconjuramiento

Santa Bárbara bendita.
Que en el cielo estás escrita con papel y agua bendita.
Líbrame de las centellas y del rayo que crepita.

Esconjuramiento aragonés. Popular

domingo, 3 de julio de 2016

El Santo Grial en Aragón II parte. (Las iglesias griálicas)



La tradición griálica en Aragón es fuerte y arraigada.
Proponemos esta segunda parte del reportaje para aumentar la información anterior y explicar todos aquellos enclaves griálicos aragoneses
Y no es para menos. El objeto sagrado, el objeto de poder más importante de todos los tiempos (junto con el Arca de la Alianza probablemente) ha pasado en Aragón la mitad de su vida.
Mira que hay sitios a lo largo y ancho del mundo para que el objeto santificado más trascendente de la historia se custodie, ¿verdad?, pues mira por dónde, Aragón fue el escenario escogido durante cientos de años.

Santo Grial
Tradicionalmente, cogeremos la definición de Grial como la de la copa que Cristo utilizó dura<nte la última cena en casa de José de Arimatea.
La misma copa que el día de la crucifixión, contuvo la mismísima sangre de Jesús.
No tocaremos el tema (por ahora) de “grial” como “Descendencia de Cristo y La Magdalena”.
(¿ Os suena la historia de una niña llamada Sara…?)
Añadiremos eso sí, que no es el único objeto sagrado que haya habido en nuestra tierra. Pues en el incendio del castillo de Montearagón del año 1477, ¿ sabéis qué sagrada reliquia se perdió para siempre ?
Desapareció pasto de las llamas un trozo del pan que se había utilizado durante la última cena.

Pintura representativa del incendio de Montearagón
Pero bueno, vamos al Grial…
José de Arimatea, guardó celosamente este recipiente sagrado con la sangre recogida de Jesús y poco más tarde, San Pedro apóstol, lo llevó a Roma.
Estuvo unos años allí pero el Papa Sixto II, martirizado por el emperador Valeriano, ordenó al entonces diácono Lorenzo
 (San Lorenzo, más tarde), que intentase deshacerse de los bienes de la iglesia. De los más preciados al menos, y Lorenzo ni corto ni perezoso, tomó los bienes más importantes y los repartió entre los más necesitados y el mayor tesoro, el Santo cáliz, lo llevó a su tierra.

Claustro de la iglesia de San Pedro el Viejo (Huesca)

Lo escondió en Huesca. Fue traído personalmente por Cirilo de Capadocia.
El Santo Grial estuvo a salvo durante unos años pero tanto con la llegada de los musulmanes, como más tarde con la invasión francesa, como en la guerra civil española... corría peligro.
Había que evitar que la mayor de las reliquias pasara a otras manos y aquí comenzó la loca carrera por defender el cáliz.
En varias épocas, el Santo Grial está perdido y vuelve a aparecer siglos después. Esta es una de ellas.
Hasta que llegó al monasterio de San Juan de la Peña, y después de su salida del mismo se dice que estuvo oculto en distintos puntos de la geografía aragonesa.
Se sabe que fue guardado por breve espacio de tiempo en San Pedro de Tabernas junto a una reliquia del Santo.

San Pedro de Tabernas
Estuvo custodiado en secreto durante años en la Catedral de Jaca, en la localidad de Bailo también lo ocultaron durante años, el Monasterio de Siresa también fue protector de la Santa Copa, los vecinos de Yebra de Basa también lo ocultaron durante un tiempo, en el pueblo de Calcena tuvo tanta repercusión la custodia del Grial, que incluso el nombre de la localidad, se tomó de ahí e hicieron aparecer el Santo Cáliz en el escudo de la localidad.

Iglesia de Bailo

Interior de la Catedral de Jaca

Yebra de Basa
Monasterio de Sieresa
Escudo de Calcena

En San Juan de la Peña fue venerado durante siglos e incluso los peregrinos que pasaban por aquella parte del Camino de Santiago lo veneraban con tanta devoción como al mismísimo apóstol.
El Cáliz permaneció allí hasta que el Rey de Aragón Martín I el Humano lo hizo ir a buscar para custodiarlo en el mismísimo palacio de la Aljafería.
Quién nos iba a decir que un edificio de construcción musulmana custodiaría una de las mayores reliquias de la cristiandad, ¿verdad?
En la Aljafería permanece poco tiempo el Grial pues es llevado a Barcelona y conservado en la catedral.

San Juan de la Peña
También el magnífico Palacio de la Aljafería fue custodio del Grial
Catedral de Barcelona, el trayecto está llegando a su fin...

Poco tiempo más tarde se traslada a la catedral de Valencia y a día de hoy, ahí permanece.
A buen recaudo y solo utilizado en actos de la mayor solemnidad.

Valencia. Capilla del Santo Cáliz




sábado, 2 de julio de 2016

Trasmoz, el pueblo maldito



Bueno, pues aprovechando que hoy, día 2 de Julio del presente de nuestro señor el demoino, estamos en Trasmoz, presentando nuestro libro en la feria, creo conveniente contaros las inigualables maravillas de esta localidad.
Hay en Aragón un pueblo que es único en España.
Único por su enclave y su belleza, único por sus mitos y leyendas.
Y único porque es el único pueblo de España y puede que del mundo que oficialmente, está maldecido por la iglesia.
En el concepto de pueblos malditos, hemos añadido en algunas ocasiones varios pintorescos nombres como Belchite, Ochate…
Pueblos en los que se recopilan psicofonías, se pueden conseguir extrañas fotos, etc…
No es el caso de Trasmoz.
Trasmoz va mucho más allá. MUCHO.
Está maldito bajo el sello oficial de la iglesia. Constatado. Con documentos auténticos.
Durante décadas, la localidad estuvo enfrentada contra el poder ejercido por el Monasterio de Veruela.
Corría el año 1252 cuando el Obispo de Tarazona, ya se refirió al pueblo como maldito “por no seguir los dictados del abad y por ignorar las leyes de Dios y abandonarse sus gentes a prácticas heterodoxas”.
Impresionantemente, el Obispo, dictó sentencia de excomunión contra todo el pueblo.
Los datos nos dicen que el tema principal de la discordia venía por un argumento de  reparto de leñas entre Trasmoz y el Monasterio.
El Monasterio de Veruela era prácticamente y por así llamarlo, el dueño de todos los pueblos de los alrededores.
En la edad media, el abad de un monasterio era una persona poseedora de muchísimo poder.
Era como un pequeño rey, en la zona.
En el pueblo siempre había habido una gran tradición brujeril y los habitantes del mismo, aún siendo conocedores del caso, parecía que lo permitían, o al menos que no les importaba y fue precisamente esta situación, la que aprovechó el abad para lanzar la terrible maldición contra el poblado.
Por ejemplo en el siglo XVI, una discusión por el control de las aguas y explotación de las acequias se convirtió en una auténtica guerra.

Trasmoz y su castillo

En alguna discusión, el Señor de Trasmoz, Don Manuel Ximenez de Urrea, fue incluso capaz de arrojar desde la torre del homenaje de su castillo a más de un monje del monasterio.
La guerra entre los partidarios del Señor de Trasmoz y los del Monasterio fue cruel.
Participaron en ella más de dos mil guerreros y finalmente, el Monasterio pidió ayuda al Obispo de Tarazona quién se personó allí mismo y allí mismo, en la capilla principal del Monasterio, se produce el maleficio contra el pueblo.
Corría exactamente el año 1512.
Los monjes del monasterio, se arrodillaron todos para suplicar la intervención de Nuestro Señor.
La cruz de la abadía, se cubrió con un gran paño negro.
Y en ese momento, en voz alta y clara, se recitó el Salmo de la maldición de David:
 

Oh Dios de mi alabanza, no permanezcas callado,

   porque la boca del malvado y la boca del engañador se han abierto contra mí; han hablado de mí con lengua mentirosa,

    y con palabras de odio me han rodeado, y han peleado contra mí sin causa.

    En pago de mi amor me han sido adversarios, mas yo oraba.

    Y han puesto contra mí mal por bien y odio por mi amor.

    Pon a un malvado sobre él, y Satanás esté a su diestra.

    Cuando fuere juzgado, salga culpable, y su oración sea para pecado.

    Sean sus días pocos; tome otro su oficio.

    Sean sus hijos huérfanos y su mujer viuda.

    Y anden sus hijos vagabundos y mendiguen, buscando su pan lejos de sus desolados hogares.

    Apodérese el acreedor de todo lo que tiene, y extraños saqueen el fruto de su trabajo.

    No tenga quien le haga misericordia, ni haya quien tenga compasión de sus huérfanos.

    Su posteridad sea talada; en la segunda generación sea borrado su nombre.

    Sea recordada ante Jehová la maldad de sus padres, y el pecado de su madre no sea borrado.

    Estén siempre delante de Jehová, y él quite de la tierra su recuerdo.

    Por cuanto no se acordó de hacer misericordia, y persiguió al hombre afligido y menesteroso y al quebrantado de corazón, para matarlo,

    y amó la maldición, que ésta caiga sobre él; y como no quiso la bendición, que ésta se aleje de él.

    Y se vistió de maldición como si fuera su vestimenta, y entró como agua en sus entrañas y como aceite en sus huesos.

    Séale como vestido con que se cubra y en lugar de cinto con que se ciña siempre.

   Sea éste el pago de parte de Jehová para mis adversarios y para los que hablan mal contra mi alma.

    Y tú, Jehová, Señor mío, haz bien conmigo por amor de tu nombre; líbrame, porque tu misericordia es buena.

    Porque yo estoy afligido y necesitado, y mi corazón está herido dentro de mí.

    Me voy como la sombra cuando se alarga; soy sacudido como langosta.

    Mis rodillas están debilitadas a causa del ayuno, y mi carne desfallece por falta de gordura.

    Yo he sido para ellos objeto de oprobio; me miraban y meneaban su cabeza.

    Ayúdame, oh Jehová, Dios mío; sálvame conforme a tu misericordia.

    Y sepan que ésta es tu mano, y que tú, oh Jehová, has hecho esto.

    Maldigan ellos, pero bendice tú; cuando se levanten, sean avergonzados, pero regocíjese tu siervo.

    Sean vestidos de ignominia mis adversarios, y sean cubiertos de su vergüenza como con un manto.

    Yo alabaré a Jehová en gran manera con mi boca, y en medio de muchos le alabaré.

    Porque él se pondrá a la diestra del pobre, para librar su alma de los que le juzgan.

También los monjes pueden en casos extremos, echar terribles maldiciones

Tras recitar cada verso, los monjes daban un campanazo.
Para que quedara constancia del hecho.
Para que todos supieran que aquello, era palabra de Dios.
Todos y cada uno de los golpes de campana, se escucharon en todos y cada uno de los pueblos de la comarca.
La maldición es terrible, el Salmo de David es poderoso y cruel y cae como una losa sobre los habitantes de Trasmoz, de los cuales el Obispo dicta que jamás ninguno de los nacidos en esta localidad podrán entrar en el reino de los cielos.
Jamás.
El ritual se practicó una fría madrugada.
Los campanazos despertaron a todos los habitantes de los pueblos del Moncayo.
Campanazos tétricos, malditos.
No tocaban a misa. No tocaban a muerto. No.
Desde el Monasterio se estaba lanzando una terrible maldición.
Cada vez que una frase terminaba… toque de campana. Eran precisamente estos campanazos los que le daban el poder al conjuro.
El Salmo de David, como habéis leído, relata lo que le sucederá al impío cuando Dios actúe en su contra.
Ocho años después de la terrible maldición, la torre del homenaje, sufre un terrible incendio y el castillo de Trasmoz, es abandonado.
Tan solo las bruxas y sus demonios osaban entrar a sus ruinas.
Las bruxas han seguido reuniéndose en el castillo hasta incluso nuestros días.
Han pasado más de 500 años desde la maldición.
La maldición y excomunión sobre Trasmoz nunca jamás se levantó.
Hoy en día, sigue vigente.
Trasmoz sigue siendo un pueblo maldito.
Para la iglesia católica, todos los habitantes de Trasmoz desde entonces hasta ahora, todos, siguen malditos y jamás podrán entrar en el cielo.
Y posiblemente hoy, tanto yo como mis buenos amigos de la Editorial "Doce Robles", que estamos mostrando los mitos y las leyendas de la zona... tampoco.

Capilla desde donde se lanzó la terrible maldición